lunes, 4 de mayo de 2009

Una mañana de otras


Tan solo el pensar
rompe
al andar (con su marcha)
el silencio
de (la,mí) soledad.

La que abre huecos
vacíos de todo
llenos de nada.
Huérfanos de destino,
hambrientos de tí.

¿Llegarás a mí puerto hoy?
La duda
que reina en mi día.
Con sus damas,
¿Cuándo?
¿Dónde?
¿Cómo?
Soy siervo suyo.
Dominio entregado
sumido en el rumbo
de su capricho.
Nacido del viento
de tu amor.

Todo esta afuera,
quizás a tu lado.
Aquí tan solo,
la mitad que dejaste
con tu ausencia.
Necesito limpiar este aquí.
Es urgente completarlo.
Yo mismo...aún...
con tu recuerdo.
Aún así...
¡Hacerlo!
Para no perder
la(s) memoria(s)
de tu(s) presencia(s).

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