martes, 3 de marzo de 2009

El tiempo de un café (2)




En esta mañana el mar casi no es mar y la playa lo es más que nunca. Sembrada de caminantes, sigue reclamando más espacio. Unos brazos entran una gran bolsa de pan en el bar de hoy.
Un vaso de café, acompañado de un plato, ha aterrizado sonando en mi mesa. Los miro mientras enciendo un cigarrillo. La leche, el café, el azúcar, entremezclan sus sabores lentamente, como las nubes que danzan su ballet en un cielo azul alegre.
Una dama, de muchas mañanas, venida de lejos, saborea una copa de ginebra. Su mirada va con los paseantes del camino dejado por un mar, ahora, cobarde. Mis ojos se quedan con ella, interrumpidos por las figuras que pasan a distintas velocidades, observan como degusta, como se detiene, en el sabor que le llega a la boca, a los ojos; le está sabiendo el momento.
Unas pocas palomas pelean el sustento entre las direcciones que se cruzan y entrecruzan, cortos vuelos, largos saltos, unas rápidas picadas en el suelo. La vida es dura.
Las diferentes elecciones personales matutinas inundan mis oídos.
- Café con leche...
- Leche y leche corto
- Té con leche...
- Cortado largo de café...
- Largo de leche y corto de café...
- Café solo...
- ...y el periódico...
- ...¡Bote!...¡Gracias!...
Saludos, silencios, encuentros, despedidas, opiniones, juicios, escuchas... permanezco.
- Otra ginebra para la "guiri".
Unas sonrisas sobradas indican que la dama ha decidido prolongar su momento.
Una banqueta, en movimiento basto, rompe mi fluida escucha y la cierra. El reloj ha llegado. Pago y entro en el arroyo, pronto río, de personas.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

"Más"..."está"..."bote"...Te veo observador. Tienes los sentidos abiertos. El sonido, los sabores, la visión, el olor...

Anónimo dijo...

Qué bueno...es como imaginarse a uno mismo en cualquier bar, observando la rutina diaria mientras vas escribiendo, sorbiendo ese café caliente que derramas entre los labios...mientras la "guiri" te mira y se sonríe.
esqueleto.

Max Egb dijo...

Sabes... me encantaría estar sentado contigo, bebiendo despacito...mientras el mundo entra por nuestras pupilas...
(Es un autentico placer ser leido por personas como tú.)